Pepsiman
En un mundo en el que el consumismo injustificado de gaseosa se volvió una necesidad innecesaria, un hombre ha surgido de esa fábrica de freaks llamada Japón y vino corriendo a toda puta para saciar nuestra sed.
Esa rebelión inconsciente que tenemos algunos de no dejarles ganar a las empresas que aparentemente dominan el mundo en sus respectivos ámbitos con sus productos generalmente manufacturados por vietnamitas al suroeste de… alguna ciudad de por ahí, se manifiesta en nosotros con meterles los cuernos con sus máximas competencias. Por ejemplo comer en Burger King antes que en McDonalds, o usar Adidas en vez de Nike.
Está el caso que involucra a la compañía donde trabaja este personaje que nos compete hablar en el presente post en contra de esa multinacional que no se por qué no estoy mencionando su nombre después de todas las marcas nombradas en el párrafo anterior. Es que también este sería como un tipo de rebelión de mi parte, muy boluda por cierto pero rebelión al fin.
Este hombre sin rostro con la totalidad del cuerpo forrada en látex que tuvo su concepción por cesárea en una agencia publicitaria de tierras niponas allá a mediados de la década de los 90s mientras Chilavert metía golazos de tiro libre y era la imagen de la Pepsi por este lado del globo terráqueo, este individuo funcionaba para los orientales de mascota kitsch de esta empresa, tal cual Duff Man pero más pelagato.
Es quelas intenciones de este superhéroe que se manda un estadazo son muy copadas, el tema está en que se tropieza y se choca contra cualquier elemento que se encuentra en su camino, lo cual dificulta y ralentiza la satisfacción de toda la gente que aguarda la venida de este individuo que les proporciona bebida cola de manera gratuita con un simple movimiento de mano.
Lo más WTF de Pepsiman no era su actitud de corredor a lo Forrest Gump que tenía, ni sus parciales ceguera y mudez que padecía, sino que era ese orificio que tenía en la cabeza, si, muchos dirán que es su boca, para mí era algo muy creepy, así como todos los spots televisivos en los que salió:
¡Ah! y lo conocí a él en un juego de Play que compro mi hermano en el año 2001 más o menos. La temática del videojuego era pasar niveles en los que manejaras a este señor que correrá sin parar por distintos escenarios recolectando latitas de gaseosa, evadiendo obstáculos, andando en skate y otras ridiculeces más que inexplicablemente hasta ahora me sigue sacando unas cuantas horas de vida cuando juego su emulador en la compu.
Sobre el autor
Vidal D. Anti fair play. Dona textos en Rock en Paraguay, The Ventan y en la revista La Factory. Seguile en Twitter, está como @vidaldel92, de vez en cuando suele decir cosas súper interesantes que te van a cambiar la vida.
Articulos relacionados
Peleas de mujeres: GRACIAS DIOS POR DARME UN PENE!!!!! →
Razones para bancar a Jack White →
Megadeth – Th1rt3en: el número de la suerte →
“Esa fábrica de freaks llamada Japón” jajajajajaja
¡Hoy mismo busco el jueguito! XD