Aerosmith en Paraguay: rendidos a sus pies
Un día más de lo pautado tuvimos que esperar para vivir este recital, como todos ya saben, por problemas odontológicos de Steven Tyler. Era un problema grave, su boca es el sol de Aerosmith en sus presentaciones en vivo, todo gira alrededor de ella.
Linaje a partir de las 7 de la noche tuvo la complicada tarea de hacer más amena la espera de la banda originaria de Boston, les siguieron The Kilks con un buen apartado de covers bien para arriba que incluían a Bon Jovi, La Renga, The Doors, entre otros. Dignos, se lucieron.
Acá un párrafo aparte dedicado para la tercera y última banda telonera de la velada, Steinkrug. Llegaron a ese lugar por mérito propio gracias a los votos de la gente en el concurso de bandas organizada por la compañía telefónica patrocinadora del evento. Si bien el público se mostró un poco indiferente ante ellos, para nada se sintieron intimidados y la requeté-movieron con temas como Demolition Crew y Live Forever. AC/DC en el ADN.
Aproximadamente a las 22:30 sube al escenario del Jockey, otra de las bandas que ni en la puta vida pensaban que iba pisar Paraguay alguna vez pero por esas cosas del dinero suceden y van a seguir sucediendo. Aerosmith, la legendaria banda de hard rock setentosa estaba dando una tocata frente a nosotros, solo al ver fotos lo creo.
(vía: zoom.ultimahora.com)
Con un setlist que estuvo marcado por su corta pero intensa duración donde si se tocaron las que se querían escuchar pero no todas, sería un trabajo épico tocar todas las favoritas del público teniendo una carrera tan prolífica de 38 (!) años.
A Steven se lo vio canchero, juguetón, e inclusive se burlo de él mismo y su accidente durante todo el concierto. Primero revelando el collar que tenía puesto, estaba hecho con los 2 dientes que perdió en la estadía en el país, ya el público extasiado ante tal sorpresa, se quita las gafas mostrando con orgullo los moretones de su cara, tal cual cicatrices de guerra.
Más que Aerosmith, Tyler es el todo. En su repertorio se incluyen groserías sutiles, provocación indirecta a mujeres, movimientos mucho más provocadores. A sus 62 años es un ícono no solo de la música sino de la cultura en general, hombres como él en el ecosistema del rock ya no abundan.
No podemos decir que se limitaron a tocar solo sus clásicos porque en este punto de la historia todos sus hits son innegables clásicos, debido a que no sacan disco desde el 2004. Eso sí, afirmamos que rememoraron en mayor volumen a su primera época, ese inicio de carrera que desde un principio estuvo compaginado con el éxito. El primer single de Aerosmith, Dream On es un verdadero ritual cuando es presenciado en vivo y en directo:
A partir de Livin’ on the Edge aparentemente se empezó a copar con firmeza el público para servir de segunda voz, cosa que el muñeco de boca grande no necesito pero todos queríamos demostrarle que estábamos ahí para cualquier necesidad que tenía. Quería sombreros, le dimos sombrero. Quería una chica que se suba en el escenario, le dimos la chica.
Después de Livin’… se vino un solo tremendo de batería por parte de Joey Kramer que en un momento dado intenta robar la atención de las más de 60.000 personas pero Steven no lo permite e interviene a tiempo en la bata para quedar como un Drummer Hero. Impresionante:
Seguía Rag Doll (¡uuuh!):
Hubo todo lo que se pudo pedir de una experiencia Aerosmith, hubo espacio hasta para errores de localización. Muchisisima gente desmayada (y los que se hacían de los desmayados ¬¬), orgasmos fingidos de hombres y mujeres que se corrían mentalmente estando a metros de la banda. Emoción a cántaros cuando entonaron I Don’t Wanna Miss a Thing (aguante Bruce Willis) seguido de Cryin’, en serio muchos cambiaron de orientación sexual durante ese tema e invocaban a gritos lo que decía la primera remera usada por Tyler:
(vía: paraguay.com)
Sirvieron de final histórica Love in an Elevator y Walk This Way, sabiendo que a este país no lo olvidarán jamás. Fue el lugar donde su alma mater, como leí que puso alguien en Tuister “dejó el alma y los dientes”, dejando en extrema felicidad a una concurrencia que lo devoró desquiciadamente, pero fue porque el mismo lo pidió nada más, tenía que pagar derecho de piso.
Vidal D.
Sobre el autor
Vidal D. Anti fair play. Dona textos en Rock en Paraguay, The Ventan y en la revista La Factory. Seguile en Twitter, está como @vidaldel92, de vez en cuando suele decir cosas súper interesantes que te van a cambiar la vida.
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