7 Cajas: muchísimo más que cajas
De entrada quiero empezar diciendo que nunca antes en la vida vi tanta gente en todos los horarios formando filas interminables para ver una maldita película en el cine.
Fue demasiado grande la expectativa, la primera vez que intenté verla fue imposible, ya no daban abasto las salas, llegué temprano pero igual, no hubo caso, no pude verla, las entradas se habían agotado, eso ya me había pasado antes, era pasable. Volví otro día, me volvió a pasar lo mismo, no sabía de dónde salía tanta gente. Para el strike 3 fui a otro lugar a probar suerte y si, ahí recién, llegué justito, conseguí las últimas entradas para la última función.
La genial estrategia de marketing para aumentar la ansiedad de ver esta película fue determinante, bajo la consigna: ¿Qué hay en las 7 cajas? finalmente lo supe y también me di cuenta de que lo importante no era el contenido de las cajas, sino esta pieza de arte como un todo, una cruda guía turística por el icónico Mercado 4.
Parece que Juan Carlos Maneglia y Tana Schembori no se olvidaron de ningún personaje del vasto mundillo del mercado. Están todos: mercaderas voluminosas, coreanos, árabes, travestis y policías cuates del chonguismo. Todos y cada uno de ellos en su hábitat natural, así que el arraigo de identidad que trae como gancho esta cinta es muy fuerte.
Ambientada en un viernes caluroso del año 2005, cuando los celulares con cámara recién aparecían por aquí. Nos presentan a Víctor, un carretillero de 17 años que sueña con ser actor y salir en la tele, pero su realidad es distinta y lo que a él le hace falta es sobrevivir. Un día de aquellos recibe una propuesta para mandar lo más lejos que pueda unas cajas de contenido desconocido, le van a pagar 100 dólares, el no sabe ni cuánto dinero es eso, solo sabe que es mucho y lo necesita, así que acepta el trabajo.
Me pongo en el lugar de alguien que no vio aún la película, así que me detengo aquí con respecto a la trama y me centro en otras cuestiones, como por ejemplo lo coloquial y familiar que resulta todo.
Coincidentemente, antes de ir a ver la película, fui al Mercado 4, institución sagrada donde consigo cosas baratas y de buena calidad (si sabes dónde encontrarlas), y a lo largo de la cinta te topas con extras con los que te cruzas todos los días, veredas por donde caminas usualmente y eso, es una sensación muy agradable que un producto tan bueno te llegue tan de cerca.
La tensión y el humor eran una combinación exótica que vienen de la mano en 7 Cajas. En gran parte de las escenas que daban para sacarte todas las uñas de las manos salía siempre alguien con alguna ocurrencia o frase hilarante que no sabemos si las entenderá algún extranjero, lo cual no importa mucho y ese es otro de los tantos puntos a favor para Maneglia-Schembori, que la rodaron para que guste acá y si le llega a gustar al exterior va a ser por concatenación nomás ya (gran… 7, no sé porque utilice una palabra tan rebuscada).
Por fin una película paraguaya para la gente que gusta de acción y vaya que le rompe a millonadas de cintas pochocleras yanquis, esas que tienen siempre la misma y agotadora fórmula: héroe mata a todos. Porque les soy sincero, estaba harto de las películas nacionales que resultaban ser nada más que bodrios estáticos que las hacen solo para gustar a críticos que toman café con tacitas de tres pulgadas. Quizás estén buenas pero no es mi tipo predilecto de cine.
No vi mucho cine sudamericano en mi vida, pero 7 Cajas sin juzgarla por su nacionalidad, es una excelente película, yo la pongo ahí al lado de Ciudad de Dios, por favor no se enojen. Si necesitan testigos para llevar esto a los Oscar, yo me ofrezco. Si, así de buena estuvo.
Sobre el autor
Vidal D. Anti fair play. Dona textos en Rock en Paraguay, The Ventan y en la revista La Factory. Seguile en Twitter, está como @vidaldel92, de vez en cuando suele decir cosas súper interesantes que te van a cambiar la vida.
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“Por fin una película paraguaya para la gente que gusta de acción y vaya que le rompe a millonadas de cintas pochocleras yanquis, esas que tienen siempre la misma y agotadora fórmula: héroe mata a todos. Porque les soy sincero, estaba harto de las películas nacionales que resultaban ser nada más que bodrios estáticos que las hacen solo para gustar a críticos que toman café con tacitas de tres pulgadas. Quizás estén buenas pero no es mi tipo predilecto de cine.” Genial!
Excelente, totalmente de acuerdo con la crítica de onda, la comparación con “Ciudad de Dios” me quitó un “chaaaaa legalmente sí, así de buena”.
Y si alguna de las chicas consigue un curso bueno de coreano, me avisa y vamos juntas
La comparación con Ciudad de Dios es inevitable. Lo que no me gustó tanto fue el uso de humor en lugares innecesarios, rompe la tensión (exelente, por cierto) que logra, pero al parecer a la mayoría de la gente le gustó o simplemente ignoró eso.
P.D.:”Mercado 4, institución sagrada donde consigo cosas baratas y de buena calidad (si sabes dónde encontrarlas)”, yo creo que esto merece una entrada aparte, y con direcciones bien específicas…
EXCELENTE, ya mismo quiero verla
Creo que victor iba a poder comprarse ese celular vendiendo repollos antitusivos y topos importados, mi parte favorita fue cuando harry resucito gracias a la piedra
gracias vidal por el comentario! increible tambien tu biografia al final de la pagina! los sueños se cumplen! abrazos